El Formac Villarrubia ha acogido con los brazos abiertos el sorteo deparado este pasado jueves en la Copa RFEF. Será en los dieciseisavos de final de este torneo después de ser encuadrados en el Cuadro C y después de caer en suerte el Illescas con el factor campo a su favor.
Y es que el Villarrubia recibirá el miércoles 28 en el Nuevo Campo al equipo sagreño y, en caso de ganar, volverá a recibir en el Nuevo Campo al vencedor del Playas del Calviá – Lorca.
“Lo que queríamos en este sorteo era, por supuesto, jugar en casa, con nuestra gente y que disfrutaran de esta fase nacional de la Copa RFEF en nuestro campo para evitar desplazamientos lejanos y, más todavía, en plena competición. Por eso estamos contentos” reaccionaba Miguel Aroca tras el sorteo.
En este sentido, explicaba que “queríamos evitar al Illescas por el hecho de ser un equipo de nuestro grupo y que ya nos vamos a enfrentar en liga. La idea era que saliera en casa y hemos tenido suerte. Ahora toca pelear e intentar pasar de eliminatoria. Lo bueno es que este enfrentamiento tendrá un castellano manchego en la siguiente ronda y eso es bonito y bueno para nuestro fútbol”.
Mientras tanto, la plantilla blanquiazul se ejercitará este viernes con la mirada puesta en el compromiso de este domingo, a partir de las 12 de la mañana, en La Fuensanta y ante el Conquense.
