HERMANDAD DE LA VIRGEN DE LA SIERRA

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Nació esta Hermandad de la Virgen de la Sierra para mantener viva la fe y los bienes espirituales legados de nuestros antepasados, y fomentar el culto y veneración colectiva en honor de nuestra Madre Celestial la Santísima Virgen de la Sierra. Cofradía que al parecer fue creándose con los antiguos Mayordomos, cuya institución de mayordomo venía funcionando «desde muy antiguo».

La Hermandad de la Virgen de la Sierra en el tiempo.

De la antigüedad de la Cofradía o Hermandad de la Virgen de la Sierra hay antecedentes de su existencia ya en el año 1560, y viene funcionando con el real consentimiento desde siempre. Creo que la primera noticia que se tiene de la antigüedad de esta cofradía está en los antecedentes que obran en el legajo 363 del Archivo Histórico Provincial de Ciudad Real, donde se encuentran varias escrituras de imposición y reconocimiento de censo a favor de la Cofradía de Nuestra Señora de la Sierra Alta -como textualmente dicen estas escrituras-, ordenadas cronológicamente desde los años 1560 la primera y 1817 la última, otorgadas en Almagro.

Con el paso de los tiempos llegamos al siglo XVIII, el llamado siglo de la ilustración, vemos cómo esta Hermandad, al objeto de allegar fondos para los cultos y para el mantenimiento de la devoción y de aquellas obras de restauración necesarias, determinó «que se realizara una cuestación entre los romeros que acuden a las fiestas de septiembre; que esta cuestación la hagan dos hermosas muchachas ataviadas con el traje típico de cada pueblo que acudía a la fiesta; así cada mayordomo mandaba dos doncellas ataviadas con su traje típico». Dio esta solución el resultado apetecido, pero las muchachas se vieron, en alguna ocasión, asediadas y comprometidas por los romeros, y como la colecta era cada vez más abundante y daba para sufragar todos los gastos, no se le dio demasiada importancia a estos hechos. Hechos que llegaron a conocimiento de la autoridad eclesiástica competente, cuando el 1 de Abril de 1739, llegó a la parroquia un visitador. Éste ordenó la suspensión del acuerdo de la Hermandad, de celebrar tal colecta, bajo la amenaza de excomunión, y que, en lo sucesivo, no se hicieran en el Santuario más fiestas ni congregaciones de hombres y mujeres sin licencia del Prelado.

El 22 de Octubre de 1770, sobre esta Cofradía, los alcaldes ordinarios de Villarrubia de los Ojos, Pedro Camacho Yébenes y José Antonio López, contestaron a una carta que el Conde de Aranda mandó a todos los ayuntamientos con motivo de suprimir los excesivos gastos que a ciertas cofradías y hermandades les suponía sus manifestaciones festivas, ya que, en muchos casos, sus «mayordomos» por rumbosidad y emulación se quedaban arruinados. En la contestación los referidos alcaldes dijeron: «En la hermita de la milagrosa Imagen de Ntra.Sra.de la Sierra Patrona de esta villa distante legua y media de la población se hacen dos fiestas por el Ayuntamiento en los días de Anunciación, y Natividad de Nuestra Señora para lo que tiene consignado en el reglamento de el real consejo cuatrocientos y sesenta reales cada año, para las misas y zera, carruages, y comida y amas ay cofradía que se compone de los que han sido mayordomos los que nomvran cada año a uno de los muchos que lo pretenden el qual solo paga por razón de gastos de Iglesia quarenta reales vellon a mas de lo que tiene el gasto de comida en dicha hermita para su familia y algunos convidados, en la que gastara como seiscientos reales poco mas o menos es conveniente subsista esta antiquisima Mayordomía que preside a las de otras diez cofradías de distintos lugares de contorno que concurren a dicha funzion de la Natividad, y ospeda a las personas eclesiásticas que se comvidan y acostumbran a concurrir a dicha funzion; pero sera conduzente dar facultad a la justicia para que el caso de advertir inmoderazion en los convites y gastos de dicho maiordomo los modere y reduzca a los términos devidos».

De la contestación de estos alcaldes se desprende que una de las fiestas que se celebraban en el santuario, en honor de la Virgen de la Sierra, era el 25 de marzo, día de la Anunciación, por lo que es muy posible que esta fiesta sea el origen de nuestra romería tradicional del Lunes de Resurrección.

Actividad de la Hermandad.

Esta Hermandad, a lo largo de su dilatada historia, por imperativo de los acontecimientos sociales que se han ido sucediendo, ha pasado por ciertas vicisitudes que sin dejar de existir ha tenido períodos de menor actividad, e incluso de inactividad total.

La Hermandad siempre ha debido estar en estrecha colaboración con la capellanía del santuario, y siendo el Capellán la figura administradora del patronazgo del Sr. Duque de Híjar en el santuario, tanto en lo espiritual como en lo material, debió existir estrecho entendimiento entre ambas instituciones (capellanía y hermandad) cuando, en el año 1844, el santuario estaba en estado ruinoso tomaron la decisión de que una representación de la Hermandad visitase al duque de Híjar para pedirle, como dueño del santuario, autorización para su restauración. Es entonces cuando la Imagen de la Virgen tiene la ocasión de venir a Villarrubia por primera vez, ya que creyeron conveniente que durante las obras la Imagen no permaneciera allí.

Tras unos años de poca actividad, la Hermandad se reorganiza en el año 1934, y sus primeros Directivos fueron D.Diego García Fernández, D.Sinforoso Román, D.Erasto Huete, D.Catalino Sánchez Crespo, D.Juan Manuel Mena, D.José María Zapata, D.Santiago Sánchez, D.Alejandro Baeza, D.Rafael Villegas, D.Manuel Díaz, D.Cecilio Maján, D.Leoncio Vallejo, D.Leoncio Muñoz y D.Emeterio Díaz. Siendo nombrado Presidente D. Diego García Fernández y Secretario D.Erasto Huete.

Finalizada la contienda civil es cuando se reorganiza de nuevo la Hermandad tras los tres años de obligada interrupción, teniendo lugar la primera reunión de su Junta Directiva, el 26 de Abril de 1939, compuesta por D. Zacarías Carrasco, D.Sinforoso Román, D.Alejandro Baeza, D.Catalino Sánchez-Crespo, D.Aureliano Muñoz, D.Mariano Valdelomar, D.Leoncio Moreno, D.Juan Manuel Mena, D.Rafael Villegas, D.Santiago García, D.Mariano Villegas, D.Cecilio Maján, D.Manuel Villegas, D.Leoncio Vallejo, D.José María Zapata y D.Erasto Huete, en la que, al haber fallecido violentamente en la guerra el anterior Presidente, D.Diego García Fernández, quedó nombrado Presidente D.Sinforoso Román, y Secretario D.Erasto Huete.

Inmediatamente, la reorganizada Directiva, se pone a trabajar y la gestión primera y más importante que hacer es la construcción de una Imagen de la Virgen, y para ello se busca un imaginero que sea capaz de hacerla basándose en las manos de la Virgen y la cabeza del Niño que, como ya hemos visto, milagrosamente quedaron sin destruir, y se piensa en el escultor sevillano Sánchez Cid. Tomada esta decisión, inmediatamente el Presidente, D. Sinforoso Román, se pone en camino portando las reliquias, y una vez en Sevilla dicho escultor tras examinarlas no se atreve a hacer la nueva Imagen basándose en estos restos. Seguidamente se piensa en llevarlos a uno de los mejores talleres de Madrid donde, en un convento Benedictino, un fraile escultor imaginero se pone a trabajar sobre la base que se le ofrece y construye la nueva Imagen, réplica de la primitiva destruida, reuniendo en Ella las características de la original parecida a todas las Vírgenes Negras. La nueva Imagen recién llegada a Villarrubia fue bendecida por D.Juan Mugueta, Canónigo Magistral de la Catedral de Ciudad Real, el día 25 de Marzo de 1940, Lunes de Resurrección, en el parador del Santuario.

Desde entonces, hasta nuestros días, la Hermandad ha venido ejerciendo su actividad ininterrumpídamente. Los directivos de aquel inicio, de lo que hoy es la Archicofradía, dejaron testimonio de su reorganización en un escrito inserto en el diario Lanza, del día 7 de Septiembre de 1944, donde se hace una breve historia contemporánea más reciente de la Hermandad a partir del año 1911, en el que toma vigor la nueva asociación religiosa, con unos corazones jóvenes llenos de fe y de amor a nuestra amada Patrona, pasando después por un desarrollo raquítico y lento casi de inactividad hasta el año 1934, en el que de nuevo es reorganizada para extinguirse en 1936 por causa del estallido de guerra civil.

En la segunda mitad de la década de los años 1.940, se toma la iniciativa con el Sr. Cura Párroco, D. Luis Fernández Mayoralas, y la Camarera de la Virgen, Dª Teresa Díaz, de coronar la Imagen de Nuestra Sra. de la Sierra. Para ello la Junta Directiva de esta Archicofradía organiza una colecta para costear la corona en la que participa todo el pueblo, y el día 24 de Agosto de 1947, es coronada por el Sr. Obispo de Ciudad Real. Así se manifestaba un hijo de Villarrubia, José Banegas Ruiz, en carta familiar remitida a su hermano Eugenio que estaba cumpliendo el servicio militar, fechada el 25-8-1947: La Virgen la trajeron ayer, y fue coronada en un Altar levantado donde están los «caños» en la Plaza del Ayuntamiento.

En el año 1954, en la reunión de la Junta Directiva del día 16 de Febrero de 1954, a propuesta del Presidente Nato y Director espiritual y Cura Párroco, D. Luis Fernández Mayoralas, se acordó hacer un Camarín para la Santísima Virgen en el frontal del Altar Mayor antes de la colocación del retablo que se estaba haciendo. Construcción que debía estar finalizada antes del día 30 de Enero de 1955 por ser el día elegido para su inauguración, solicitando al mismo tiempo permanezca la Imagen de la Virgen en la localidad, para que presidiera la bendición e inauguración de dicho retablo.

Pero, bien avanzadas las obras y, viendo que ocupaba demasiado la vía pública, y que estaba rompiendo la estética del edificio del templo, en reunión de la Junta Directiva celebrada el día 25 de Diciembre de 1954, se acordó deshacer lo que iba construido del Camarín. El nuevo retablo quedó puesto e inaugurado como estaba previsto en presencia de la Sagrada Imagen de Nuestra Excelsa Patrona.

A invitación del Sr. Obispo Prior de Ciudad Real, se participó en la clausura del Año Santo Mariano celebrado en la Capital, el día 8 de Diciembre de 1954, en el que participaron las Imágenes de la Virgen Patronas de los Pueblos de la Provincia. La Directiva de la Hermandad, organizó la participación de nuestra Sagrada Imagen de la Virgen para dar cumplimiento a dicha invitación. Los encargados de todo ello fueron D. Rafael Úbeda y D. Francisco Zamora, dos jóvenes entusiastas componentes de la Directiva, que prepararon adecuadamente un camión para que no le sucediese ningún percance a la Imagen en el camino de ida y vuelta a Ciudad Real, así como la organización de la caravana de vehículos que formaron el cortejo de la Virgen.

Hasta la década de los años 1960, la Hermandad había luchado por conservar la edificación del santuario, pero es a partir de esa década cuando se observa un mayor movimiento en sus actividades. Ya en 1960 el chapitel hubo de ser reparado como el santuario en general por su estado deprorable. Unos años más tarde se reestructuraron las viviendas, redistribuyendo el número de habitaciones que se convirtieron el 17 las viviendas para los romeros de temporada.

El día 18 de Mayo de 1969 se celebra la primera Romería del tercer Domingo de Mayo, recién implantada a iniciativa de D. Lucio Moreno, miembro de la Directiva, que tuvo una gran acogida en Villarrubia y entre los romeros de nuestro entorno geográfico. Seguidamente, a principios de los setenta, la nueva directiva reforma el parador ampliándolo para dejarlo como ahora se ve, y los espacios adyacentes son también ensanchados como la zona de llegada por los almendros y la antigua «era de trillar» que se convirtió en una espaciosa glorieta. Así mismo, por mediación de la Directiva fue arreglada y asfaltada la carreterilla de acceso al santuario. Unos años después se encauzó el agua del nacimiento hasta los depósitos actuales que se hicieron entonces para aprovechar al máximo los recursos de los manantiales. La misma Directiva unos años más tarde reformó el interior del patio poniéndolo en forma solariega porticada. Las sucesivas directivas se han movido en la misma dirección. Han mejorado las viviendas ampliándolas y confortándolas de acuerdo con la demanda de los nuevos tiempos dotándolas de instalación eléctrica, consiguiendo mejorar los servicios de salubridad e higiene. En las sucesivas reparaciones ha sido ampliado el Camarín de la Virgen, donde se instaló en su ventana una magnífica vidriera donada por una devota. También se consiguió para el santuario una línea telefónica. Una de las gestione más destacadas ha sido la reparación de la Sagrada Imagen que con el paso del tiempo iba deteriorándose. Por último la Directiva no ha parado hasta conseguir la ampliación de la carreterilla, gracias a la donación de terrenos por parte de los propietarios colindantes.

Presidentes desde su reorganización en 1.934 Períodos
Diego García Fernández …………………………………………………………. 22-8-1934 a +
Zacarías Carrasco (Notario, reunión inicial ……………………………….. 26-4-1939 a 20-6-1939
Sinforoso Román …………………………………………………………………….. 20-6-1939 a 10-1-1947
José Joaquín Lozano …………………………………………………………………. 10-1-1947 a 17-5-1950
Isidoro Villalobos …………………………………………………………………….. 17-5-1950 a 14-3-1955
Mariano Villegas Ladrón de Guevara ……………………………………… 14-3-1955 a 3-2-1960
Lucio Villegas Ladrón de Guevara ………………………………………… 3-2-1960 a 23-7-1963
Rafael Villegas Toledo (Presidente accidental) …………………………. 23-7-1963 a 4-8-1964
Angel de la Osa (Interino) …………………………………………………….. 4-8-1964 a 14-1-1967
Manuel Crespo López ……………………………………………………………. 14-1-1967 a 2-10-1971
Florencio Palomino Peinado …………………………………………………… 2-10-1971 a 24-10-1986
Tomás Rabadán Barba …………………………………………………………… 24-10-1986 a 11-10-1990
Salvador Ramírez de Arellano ……………………………………………….. 11-10-1990 actual

Colaboración de la mujer en la actividad de la Hermandad.

Concluimos diciendo que aunque todo el protagonismo, en el buen funcionamiento de la Archicofradía, generalmente lo ha llevado el hombre, la mujer, silenciosamente, ha tenido una labor muy relevante, aunque no halla participado en decisiones importantes, sí ha colaborado en el buen desarrollo de las actividades de la corporación Directiva.

En la primera ocupación que la vemos, al servicio de la Imagen de la Virgen, es en la de Camarera, cargo este que viene desempeñando desde no sabemos cuando, pero es muy posible que vaya ligado a la misma existencia de la Imagen, pues no hay noticia de cuando empezó esta figura a ocuparse de estos servicios. Su ocupación principal era la de encargarse de custodiar los bienes materiales para realzar la belleza de tan Sagrada Imagen, y preocuparse de su buena ornamentación y embellecimiento.

En el año 1911, cuando reunidos diez varones para reorganizar de nuevo la Cofradía, bajo el beneplácito del Sr. Cura Párroco, con el Título de nuestra amada Patrona, esta Cofradía de la Virgen quizá fue una de las pioneras en darle a la mujer un papel de cierta relevancia, en el que hacer, al servicio de la Virgen de la Sierra, lo mismo en lo material que en lo espiritual, pues en los Estatutos del año 1911, ya se nombra una Junta de Señoras Asociadas en la que su cometido fundamental era la de procurar allegar fondos o recursos para la mejor marcha y desenvolvimiento económico de la Cofradía mediante mesas petitorias, rifando objetos o vendiéndolos. Función que siguen desempeñando en la actualidad, reclamando de alguna manera la generosidad de los devotos.

Ciudad Real, Junio de 2.001
Fabián Martínez Redondo

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