El técnico del Formac Villarrubia se mostraba con cierto sabor agridulce después del empate conseguido en el campo del San Clemente.

El Formac Villarrubia no pasó del empate en su visita a San Clemente. El equipo blanquiazul cuajó un buen partido, pero no fue suficiente para terminar empatando ante un colista que terminó con diez y donde la puntería volvió a quedar en evidencia después de tener muchas ocasiones. Braun, a los siete minutos, adelantó al equipo de Darío tras un robo, una contra y una buena definición, mientras que Ismael, a diez minutos del final y con el aire a favor, se sacaba un gran gol para dejar en tablas el marcador.

“La valoración es agridulce porque teníamos los tres puntos y en los últimos minutos nos marcaron un gran gol y se llevaron el empate. Ellos lo intentaron y tuvieron sus opciones, pero nosotros tuvimos situaciones de haber hecho más goles y haber finiquitado el partido mucho antes. No lo conseguimos y está claro que, en el fútbol, el que perdona, lo paga, y así fue. No fue un partido tan redondo como el de la semana anterior, pero sí creo que merecimos la victoria por ocasiones”, explicaba en primer lugar el entrenador del Formac Villarrubia.

En ese sentido, Darío apelaba al trabajo para seguir creciendo. “No queda otra que seguir trabajando. Les dije a mis jugadores que cabeza alta porque quedan muchas jornadas y lo que hay que hacer es hacer bueno este punto el próximo sábado, en casa, ante el Calvo Sotelo porque nos daría un plus de moral a todos. Vamos a trabajar y a corregir errores y, sobre todo, a aprender. Lo positivo es que no perdemos, pero es cierto que no ganamos”, finalizaba el técnico.

El Formac Villarrubia volverá al trabajo este lunes para empezar a preparar el partido del próximo sábado, en el Nuevo Campo, ante el Calvo Sotelo de Puertollano.  

Fuente: lanzadigital